lunes, 31 de agosto de 2009

LOS PLANTEOS DEL JOVEN MONJE


Recordemos el segundo enunciado de la sentencia de Max Born sobre la imposibilidad de que la población pueda comprender los logros científicos debido al choque entre las cosmovisiones derivadas del conocimiento científico y las cosmovisiones sustentadas por la tradición. ¿Puede el conocimiento científico, entendido no como un cuerpo particular de enunciados, sino como un conjunto de modelos y teorías legitimados a partir de ciertos compromisos racionales ser comprendido por la mayoría de la población?


Aproximémonos al tema a partir del siguiente diálogo entre un joven monje y Galileo (de la obra de Bertolt Brecht: Galileo Galilei)

-¡Señor Galileo, necesito hablar con usted!
-¡ Hable, hombre, hable! El hábito que lleva le da derecho a decir lo que quiera.
-¡Pero yo he estudiado matemáticas!
-¡Eso no estaría mal si le sirviera de vez en cuanto para admitir que dos más dos son cuatro!
-Hace varias noches que no duermo. No podía armonizar el decreto de la Inquisición, que he leído, con los satélites de Júpiter, que he visto. Por eso hoy resolví decir misa bien temprano y venir a verlo.
-¿Para anunciarme que Júpiter ya no tiene satélites?
-No. Pero me he dado cuenta de la sabiduría del decreto, Leyéndolo, se me han revelado los peligros que una investigación sin freno podría acarrearle a la Humanidad, y he resuelto renunciar a la astronomía. De todos modos quisiera hacerle conocer los motivos que pueden llevar a un científico a abstenerse de desarrollar determinada teoría.
-Me permito recordarle que conozco muy bien esos motivos…


Los invito a reflexionar, a argumentar y debatir posibles respuestas a las siguientes cuestiones:

¿Cuáles podrían ser los motivos según los cuales, el joven monje convierte a la descripción del Universo centrado en el Sol con una Tierra móvil, modelo de Copérnico que defiende Galileo y al conocimiento científico en general en saberes riesgosos? ¿Sería conveniente no entender, cuando ese entendimiento se opone a ideas cuya “verdad” nos resulta fundamental para nuestra existencia?

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